(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2001) Higueras, Alvaro
La interacción regional durante el Periodo Intermedio (500-1000 d.C) en los Andes centro-sur (correspondiente al Horizonte Medio en los Andes Centrales) es esencial para la comprensión de la expansión territorial de estados prehispánicos en los Andes. En esta investigación se han estudiado cambios en los patrones de asentamiento y el uso de tierras en Cochabamba en la transición del Periodo Intermedio Temprano (200-500 d.C.) al Periodo Intermedio. Se ha sugerido que, en este último periodo, Cochabamba es colonizada por la sociedad Tiwanaku para explotar recursos agrícolas. En efecto, el Periodo Intermedio se caracteriza por la presencia de cerámica de estilo Tiwanaku, pero ello no se puede asumir como presencia de poblaciones altiplánicas. En este estudio se analiza cómo se organiza la ocupación humana y el uso de tierras en el Periodo Intermedio usando datos de la capacidad agrícola de las zonas prospectadas. La ausencia de cambios en las estrategias de uso de tierras y variaciones menores en los patrones de asentamiento del Periodo Intermedio no corresponden a una expresión de expansión territorial de Tiwanaku. Se postula el modelo de independencia de las poblaciones locales para entender la ocupación del Periodo Intermedio. Este estudio sugiere así una nueva forma de interacción regional que amplía los conocimientos de las relaciones territoriales de la sociedad Tiwanaku y de sociedades expansionistas de los Andes.
(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2001) Pärssinen, Martti
Este artículo presenta un análisis, con dos fechados radiocarbónicos, de la cerámica de la época Tiwanaku IV de Nazacara, una localidad situada a unos 45 kilómetros al sur de Tiwanaku. Al parecer, los primeros indicios de la cultura Tiwanaku aparecieron en Nazacara aproximadamente a partir de 400 d.C. No obstante, esta primera subfase no presenta cambios relevantes en el patrón de la alfarería tradicional. El cambio más significativo empezó alrededor de los años 550/600 d.C., cuando la cerámica pintada y las formas de la alfarería ceremonial y pública aumentan radicalmente y presentan rasgos casi puros del estilo Tiwanaku IV. Según el autor, esta segunda subfase probablemente significa la incorporación de Nazacara en el dominio del poder de la elite de Tiwanaku.
(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2001) Burkholder, Jo Ellen
Cada vez más investigadores notan una amplia gama de variabilidad en la cerámica de Tiwanaku, no solo en las regiones a mucha distancia, sino también en la región central de Tiwanaku, al sur de la cuenca del lago Titicaca. Esta situación hace difícil aplicar las cronologías de tres y cinco fases desarrolladas a comienzos de este siglo, como lo evidencia la gran variedad de modificaciones hechas en ellas para poder acomodar los nuevos datos. Lo que emerge de esta nueva información es que el desarrollo temporal de la entidad política Tiwanaku es, simultáneamente, más corto y complejo de lo que se pensaba anteriormente. Esto contradice los modelos de Tiwanaku como un estado monolítico altamente centralizado, con algunos pocos periodos definibles de producción cerámica o estilo decorativo.