Compiten las naciones? : dos enfoques
Abstract
En este artículo mostramos que si el análisis se concentra en los efectos directos de la apertura comercial cuando un país tiene ventajas absolutas en los dos productos en los que compite dicha apertura no garantiza el tránsito hacia una especialización y al mutuo beneficio que la teoría de las ventajas comparativas define. Esta constatación puede permitir una conciliación entre los hechos observados con la teoría del comercio internacional. La propuesta básica es retomar de Smith las ventajas absolutas y de Marx, Harrod y Keynes el mecanismo de transmisión monetaria a través de la tasa de interés en vez de los precios. Además cuando establecemos que los déficits comerciales tienen incidencia en el crédito y en la inversión resulta especialmente difícil aislar el proceso económico que sigue inmediatamente a la apertura de sus efectos de largo plazo y del problema de la ampliación o disminución de brechas entre las economías vistas en su conjunto. El paso de Tucker y Smith a Ricardo no es sólo el del paso de la teoría de ventajas absolutas o competitivas a la de ventajas comparativas, también es el cambio de preguntas sobre los procesos de largo plazo con cambio tecnológico a otras que se concentran en los efectos de un episodio único de apertura comercial y sus efectos inmediatos. We first use the Scottish debate to show a non-Ricardian way of approaching the problem of inter-national economic relations distinguishing between the effects of an once-and-for-all opening of previously closed markets and a long-term process of interaction including technical change, relative wage movements, capital movements, etc.. Then we concentrate in the relatively narrow Ricardian problem and its consequences. The framework is the simplest possible two-goods economy since exchange rate variations, relative wages, tradable and non-tradable and other important variables are put aside in order to concentrate in the effect of assuming different theories of the money and its effects. Summarizing the well-known recent expressions of Krugman in this respect and the less well-known approach of Shaikh, we conclude that specialization and mutual benefit is not the necessary consequence of the opening of markets. Widening divergence can happen with no requirement of assumptions as increasing returns.