Sansón ebanista
Abstract
Toda partida, y la distancia que origina, será siempre cruel. Sean o no anunciadas, la resignación o el silencio no resultaran nunca suficientes para un intento de calma ante la frustrada posibilidad de ese tiempo que será eternamente perdido. Queda de ese modo la pregunta incompleta, penosa, mas no infecunda: la muerte jamás responderá por aquello que debió o pudo ser. Los versos de Elio Vélez no ignoran esta verdad. Su libro todo, se construye bajo la certeza de la muerte: no una intuida, sino aprehendida desde la voz que enfrenta la lejanía del padre.