Las vasijas de Necrópolis, península de Paracas (costa sur, Perú): ensayo de análisis de su producción, su distribución y su depósito en contextos funerarios
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Boletín de Arqueología PUCP; Núm. 25 (2018): De Paracas a Nasca, interacción y transición: esferas geográficas, prácticas sociales y procesos históricos en la costa surAbstract
Alrededor de 550 vasijas fueron exhumadas por Julio César Tello y su equipo del cementerio de Necrópolis, península de Paracas, Perú, entre 1927 y 1930. Habían sido depositadas al lado, generalmente norte, de 250 de los 429 fardos funerarios, solas o en conjunto de dos o tres, a veces envueltas en un tejido. Por comparaciones con materiales cerámicos procedentes de los valles de Chincha, Pisco, Ica y Nazca, esas vasijas fueron atribuidas en el pasado, y de manera indiferenciada, a las tradiciones alfareras Topará (Jahuay y Chongos), Paracas Tardío (Ocucaje 10) y Nasca Inicial (Nasca 1). Sin embargo, esa colección de cerámica es ampliamente desconocida y nunca fue estudiada en su totalidad, o parcialmente, según una metodología adecuada que integre su contexto arqueológico, su análisis y su clasificación tecnológicamorfológica. Tal estudio, del cual se propone en este ensayo los primeros resultados, ofrece una oportunidad única de determinar el rol de los recipientes de cerámica en los rituales funerarios y las relaciones existentes entre las poblaciones Paracas, Nasca y Topará entre 200 a.C. y 200 d.C., a partir de la determinación de las producciones alfareras, de su procedencia y de sus redes de difusión. Approximately 550 vessels were recovered by Julio César Tello and his team from the Paracas Necrópolis cemetery on the Paracas peninsula, Perú, between 1927 and 1930. Each vessel had been placed adjacent to 250 of the 429 funerary bundles, generally to the north, either alone or in a group of two or three, sometimes wrapped in a cloth. Based on comparisons with ceramics from the valleys of Chincha, Pisco, Ica and Nazca, these vessels have been attributed, without differentiating them, to the Topará (Jahuay and Chongos), late Paracas (Ocucaje 10) and initial Nasca (Nasca 1) ceramic traditions. However, this ceramic assemblage is largely undocumented and has not previously been studied, in its entirety or in part, using systematic methods that include information on the archaeological context, the analytic process and a technological and morphological classification. This essay presents initial results of this type of study, offering a unique opportunity to determine the role of ceramic receptacles in the funerary rites and social relationships among Paracas, Nasca y Topará populations between 200 BCE and 200 CE, based on determining ceramic production processes, sources and exchange networks.