(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2020-12-12) Jiménez Castillo, Juan
La muerte del virrey conde de Lemos en 1672 dejó al reino del Perú sin su cabeza política durante un año y medio, quedando al mando la Real Audiencia de Lima en interinidad, lo que produjo numerosos desajustes hasta la llegada al solio virreinal de don Baltasar de la Cueva, conde de Castellar. En este contexto, se analizan las controversias gubernativas ocasionadas por la ausencia del oficio de virrey, al mismo tiempo que se concreta la naturaleza política virreinal a partir de los gobiernos interinos, en un momento en el que la Monarquía Católica atravesaba por un proceso de reconfiguración que afectó a la composición de los reinos y a la transfiguración de los oficios. La hipótesis de este trabajo propone que los virreyes ejercieron como centros de orden y vertebración política, y sus ausencias concretadas en audiencias en ínterin manifestaron mayores incertidumbres y vacíos de poder en el control efectivo del reino peruano debido a su multiplicidad.