«No es algo inalcanzable sino que se va construyendo y poco a poco se va llegando a ese umbral donde el respeto a las diferencias sea parte de los principios de convivencia en nuestro país»
Fuente
La ilusión de un país distinto: cambiar el Perú: de una generación a otraAbstract
Desde la edad de los diez años participé en organizaciones sociales. Empecé siendo parte de un grupo de niños, niñas y adolescentes quechuas en Ayacucho, haciendo arte en telar, tejido, música, danza y el retablo ayacuchano, una de las artesanías conocidas de Ayacucho. Este espacio me permitió enlazarme con otras organizaciones de niños y adolescentes, en especial con el Movimiento Nacional de Niños, Niñas y Adolescentes Trabajadores, chicos que trabajaban en mil oficios, desde lustrar zapatos. Yo acompañaba a mi madre en los negocios en el mercado, con mi hermana, y a veces también sola, vendiendo «marcianos».
Descripción
Páginas 303-311