Reuno en este libro, tres ensayos fervorosos y breves. En cada uno se estudia una cierta experiencia religiosa y de todos se desprende la misma lección—trágica y jubilosa— de la vida. Vivir es dudar, angustiarse, morir. Pero la vida es también resurrección, renacimiento, porfiada esperanza y alegría profunda. La vida es división, separación, pero es también irrompible unidad; la oscura necesidad del nó, y el sí siempre nuevo que emerge, como el sol, del seno ignoto de la noche.