(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2005) Makowski, Krzysztof; Córdova, María Fe; Habetler, Patricia; Lizárraga, Manuel
La recurrencia de patios cercados (canchas), "audiencias" y pórticos, lugares destinados para albergar largas filas de personas sentadas de manera cómoda a la sombra de techo y de espaldas a una pared, así como la presencia de plataformas accesibles por medio de rampas o escaleras cuentan entre los rasgos que definen el carácter peculiar de la arquitectura de los periodos tardíos en los Andes, un aspecto difícil de interpretar desde el punto de vista de la función. Recientes discusiones sobre las características de la arquitectura palaciega en los Andes prehispánicos han puesto en evidencia los problemas con los que tropiezan los intentos de hacer el deslinde formal y funcional entre la residencia principal del gobernante y el templo a partir de las evidencias arqueológicas. Las investigaciones realizadas en Pueblo Viejo-Pucará desde 1999 hasta el presente en el marco del Proyecto Arqueológico-Taller de Campo "Lomas de Lurín", Convenio Cementos Lima S.A.-Pontificia Universidad Católica del Perú, bajo la dirección de Krzysztof Makowski, aportan datos valiosos a la discusión del tema dado que han abarcado más de 6000 metros cuadrados de superficie excavada en cuatro de los cinco sectores del sitio, incluidas dos estructuras residenciales de elite de carácter palaciego y un templo que corona una elevación, denominado "Templo de la Cima". La comparación entre las hipotéticas moradas de dos curacas, dos residencias de elite y las demás unidades residenciales excavadas en Pueblo Viejo-Pucará deja en claro que la presencia del patio central con amplias cocinas y áreas de agasajo en forma de recintos anexos y pórticos constituye la principal diferencia entre la residencia de elite y la casa común. El patio es el área central de la vida pública, donde, de manera frecuente, se ofrecen banquetes con comida de carácter festivo, rica en la preciada carne de camélidos y de cérvidos, así como en chicha, la que se sirve en vasijas finas ejecutadas en estilos de prestigio. El palacio principal difiere de las demás residencias por la presencia de un ushnu con cámaras funerarias adosadas, dos plazas relacionadas con el culto de dos huancas y de, por lo menos, un afloramiento rocoso con ofrendas de conchas Spondylus princeps, oro y plata, el que habría sido venerado como huaca.