(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2000) Bencic, Catherine M.
Las industrias líticas en sociedades complejas del Nuevo Mundo han sido estudiadas principalmente en términos de herramientas formales y la producción especializada, mientras que las herramientas sobre lasca y los desechos de talla merecían menos atención. Sin embargo, la mayoría de las colecciones líticas se producen a través de tecnologías expeditivas o de lasca en vez de formas más acabadas. Se ha propuesto que la inversión energética en la producción lítica disminuye cuando se desarrolla la complejidad social. No obstante, las culturas andinas contemporáneas, las que comparten un cuerpo de iconografía religiosa, exhiben una gran variación en la organización de la industria lítica. En el presente trabajo se presentan dos colecciones líticas: de Iwawi, un yacimiento tiwanaku, y de Conchopata, una ciudad huari. Se considera la utilidad de estos ejemplos para entender la organización de la industria lítica en las sociedades complejas andinas y su potencial para entender las tradiciones culturales de Huari y Tiwanaku. Se concluye que las producciones líticas de Iwawi y Conchopata son poco similares y que una no se puede derivar de la otra.
(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2000) Topic, John R.; Topic, Theresa Lange
La ausencia de almacenaje de gran escala en sitios huari no apoya la interpretacion de Huari como imperio al modelo de los incas. Se señala también que el fenómeno Huari se enfocó en un culto a los ancestros a fines del Horizonte Medio 1B. En este trabajo se presentan datos que demuestran que este culto derivó parcialmente del norte del Perú y se revisan los datos de Huamachuco relativos a sus raíces histórico-sociales. Asimismo, dos formas arquitectónicas huamachuquinas, galerías largas y angostas para espacios domésticos y galpones nichados que servían como ambientes para fiestas en honor de los ancestros, fueron los modelos para la arquitectura ortogonal celular del Horizonte Medio 1B en Huari. Finalmente, y aunque la evidencia no apoya la interpretación de Huari como un estado que se expandió por fuerza militar, Huari jugó un rol crítico en la síntesis y difusión de ideas que resultaron en una profunda reorganización del paisaje social.
(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2000) Isbell, William H.
El conocimiento del pasado se crea socialmente, en contextos históricos que influyen en la forma en que se entiende e interpreta la información arqueológica. En consecuencia, a medida que los tiempos cambian, los arqueólogos deben estar preparados para modificar su forma de pensar acerca de las culturas prehispánicas. Tanto el periodo cultural denominado Horizonte Medio como el sitio arqueólogico de Conchopata, en el valle de Ayacucho, Perú, parecían bien comprendidos hasta el momento; sin embargo, excavaciones recientes han revelado nuevas e inesperadas posibilidades.Los arqueólogos creían que una nueva ideología religiosa proveniente de Tiwanaku dio comienzo al Horizonte Medio en Conchopata, pero los recientemente definidos templos en forma de «D», que se encuentran asociados con el arte denominado «Tiwanaku», no tienen paralelo en el área de origen de Tiwanaku en el lago Titicaca.Conchopata era considerado como un centro de forma irregular y habitado primariamente por especialistas en la elaboracion de cerámica, pero las nuevas investigaciones demuestran que gran parte de su núcleo arquitectónico fue bien planificado y circundado por muros perimetrales y que podría haber existido un palacio en él. Se han excavado numerosas ofrendas de cerámica gigante, lo que sugiere que esta cerámica ceremonial podría haber sido usada para preparar y servir bebidas en fiestas organizadas por los antiguos reyes. Varias formas de contextos funerarios han sido identificados, desde estructuras simples, en cavidades en la roca madre, hasta construcciones mortuorias especiales. Finalmente, un conjunto de fechados radiocarbónicos confirma algunas ideas acerca del Horizonte Medio, pero sugieren también que la iconografía Tiwanaku no llegó a Conchopata hasta mediados de su ocupación, cuando una larga tradición de cerámica polícroma ya existía en la zona. Aparentemente, Conchopata fue mucho más que un simple receptor de una nueva religión y arte procedentes del altiplano. Por ello, los arqueólogos deben estar preparados para dejar de lado viejas ideas acerca de este complejo y del Horizonte Medio, a medida que emergen interpretaciones más convincentes.
(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2000) Pérez, Ismael
Entre 1995 y 1997, la Universidad Nacional de San Cristóbal de Huamanga desarrolló labores de recuperación y puesta en valor de diversos monumentos prehispánicos, como en el complejo Huari, donde se excavaron y definieron nuevas evidencias de arquitectura megalítica de carácter funerario, con edificaciones subterráneas de varios niveles, algunas con plantas que evocan figuras de camélidos y cámaras funerarias para personajes de alto rango social. Estas son atribuidas a la época de máximo desarrollo urbano y expansión territorial del imperio Huari, el que dominó los Andes centrales entre los siglos VII y X d.C. Las estructuras en mención expresan un elevado conocimiento de la tecnología constructiva en piedra y probablemente fueron hechas por especialistas ayacuchanos que debieron recibir influencia no sólo de Tiahuanaco, sino también de otras culturas coetáneas de la sierra nor-central peruana.
(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2000) Oakland Rodman, Amy; Fernández, Arabel
En muchos aspectos de la cultura material, los tejidos huari y tiwanaku presentan y comparten rasgos iconográficos, pero se distinguen en su construcción y técnicas de manufactura. Los tejidos huari descubiertos en diferentes sitios a lo largo de la costa peruana poseen diseños que los ligan íntimamente al centro de la cultura Tiwanaku, pero también evocan distintas innovaciones iconográficas con respecto a las de este centro. En lo que respecta a los tejidos tiwanaku, sus diseños son mucho más restringidos y presentan una fuerte orientación hacia la iconografía estándar conocida para la escultura en piedra. Ambas culturas crearon una fastuosa vestimenta, la que es muy similar a primera vista, como es el caso de las túnicas en tapiz, los gorros de cuatro puntas, así como los mantos y camisas elaborados en urdimbres y tramas discontinuas, decorados por teñido al negativo. Estos tejidos, sin embargo, fueron hechos de manera diferente, obedeciendo a los patrones culturales establecidos dentro de su esfera de influencia.Las túnicas huari se distinguen por sus brillantes colores, conformados a partir de dos tejidos que se caracterizan por presentar sus orillos recortados. Estos tejidos fueron doblados y luego cosidos. Por otro lado, las evidencias de túnicas tiwanaku son limitadas: un examen de estas muestra que fueron elaboradas como las túnicas del estilo Inca, confeccionadas a partir de un solo tejido, con la abertura para el cuello realizada durante su elaboración. Otro es el caso de uno de los accesorios del estilo Huari, el gorro de cuatro puntas, que comparte atributos con aquel desarrollado dentro de la esfera tiwanaku. Ambos son sorprendentemente similares, pero los gorros huari llevan pequeños mechones entre los nudos, mientras que los ejemplares tiwanaku se caracterizan por el cambio de color en los hilos empleados. En ambos casos, estas variaciones están relacionadas con el sistema decorativo. En este artículo se discutirán evidencias textiles y la iconografía asociada a este material, el cual no ha podido conservarse en el centro de su dominio. Textiles huari, procedentes de El Brujo, valle de Chicama, Perú, serán presentados dentro de su contexto, así como también los tejidos tiwanaku registrados en el cementerio de San Pedro de Atacama, Chile. Se expondrán, por último, las similitudes y diferencias existentes en ambos estilos.