Abstract
Discurso pronunciado por el padre Felipe Mac Gregor en la inauguración del Centro de Teleducación, uno de los proyectos más importantes de la PUCP y que se concretó con el apoyo de la Embajada de la República Federal de Alemania y MISEREOR; así como del Instituto de Solidaridad Internacional e incorporándose en esta empresa el Ministerio de Educación y el Instituto Nacional de Planificación del gobierno peruano.