El movimiento de confraternidad obrera peruano-chilena y el final del gobierno de Guillermo Billinghurst
Fuente
Las historias que nos unen : 21 relatos para la integración entre Perú y ChileAbstract
La ruptura de relaciones diplomáticas entre Perú y Chile en 1910 provocó una nueva escalada en el conflicto fronterizo que mantenían ambos países por el destino de las provincias cautivas de Tacna y Arica. La elección presidencial de Billinghurst, dos años más tarde, abrió la posibilidad de negociar un entendimiento, pero los contactos que al más alto nivel se realizaron entre ambos gobiernos no lograron destrabar la situación. Surgió entonces, desde el Perú, la iniciativa de entablar un contacto amistoso entre las sociedades mutuales con la finalidad de crear un clima favorable en ambos países para avanzar en la solución del diferendo limítrofe. Las sociedades mutuales —que habían tenido un rol protagónico en la elección presidencial— actuaron en la ocasión como el brazo político del gobierno peruano y acordaron con sus pares chilenos el intercambio de delegaciones obreras que visitarían Lima y Santiago para celebrar las fiestas patrias en los respectivos países. A partir de este episodio poco conocido de nuestra historia queremos reflexionar sobre la participación política de las sociedades mutuales en el gobierno de Guillermo Billinghurst y sobre sus consecuencias.
Descripción
Páginas 133-162