Identificación de sinergias entre el portafolio de proyectos de cobre y el plan de infraestructura de transporte en el Perú
Date
2022-08-29Author
Vidal Laura, Alejandro Francisco
Rabanal Ortiz, Jhordan Alexis
Metadata
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Abstract
El Perú es reconocido mundialmente por Machu Picchu, la cultura Inca, hermosos paisajes
y como un atractivo destino culinario. No obstante, se conoce muy poco sobre su potencial y
riqueza en minerales. La minería aporta en promedio más del 10% del PBI nacional, el 60% de
las exportaciones y más del 30% de la recaudación tributaria. El Perú es uno de los principales
productores de cobre, zinc, oro y plata a nivel mundial. El cobre es el principal producto de
exportación del Perú con el 51% del total de exportaciones mineras, y es de suma importancia
para la economía del país. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (reporte del 2019),
el Perú tiene el 10% de las reservas de cobre a nivel mundial. Se considera que uno de los
principales impulsadores del crecimiento económico experimentado en los últimos 20 años ha
sido el aumento de producción minera y especialmente la de cobre.
En el 2019, el Perú poseyó una cartera de 48 proyectos mineros valorizada en 58,000
millones de dólares. De esos 48 proyectos, 25 son proyectos cupríferos que suman un total de
inversión de 40,988 millones de dólares (71% del total de la inversión en el portafolio minero).
El Instituto de Ingenieros de Minas del Perú y el Centro para la Competitividad y el Desarrollo
(2019) indicaron que, si se pone en valor el portafolio de proyectos mineros, se llegaría a
duplicar el PBI per cápita nacional en diez años. Además, añaden que los ingresos de los
ciudadanos aumentarían en promedio un 6% anual, ocasionando que se eleve el bienestar y la
calidad de vida.
La falta de infraestructura en el Perú afecta su competitividad para atraer inversión,
incrementa los costos operativos de la actividad económica e impacta seriamente en la
productividad. Dado lo difícil de su geografía, las carencias en infraestructura de transporte en
particular tienen un impacto importante en la logística de toda actividad económica y la
conectividad del país. Según el Plan Nacional de Infraestructura para la Competitividad 2019,
la brecha de infraestructura total de largo plazo (20 años) fue de 106,600 millones de dólares,
de los cuales, 47,209 millones de dólares correspondieron a la brecha en infraestructura de transporte. Por ende, para que el Perú alcance todo su potencial de desarrollo económico es
necesario cerrar la brecha de infraestructura.
La Cartera de Proyectos Mineros y el Plan Nacional de Infraestructura para la
Competitividad son los dos portafolios de proyectos más importantes del país, por ello sería
muy beneficioso que existan sinergias entre los mismos. Al brindarle a las comunidades
infraestructura de servicios básicos, se promueve el adelanto social, logrando reducir los
conflictos sociales. El incremento de infraestructura de transporte, especialmente en los países
en desarrollo, permite (i) reducir el efecto de las distancias entre regiones, (ii) la conexión a un
bajo precio con otros mercados, y (iii) la disminución de costos de producción (Fay et al., 2012).
Asimismo, sería muy conveniente la existencia de sinergias entre estos dos importantes
portafolios de proyectos, pues el aumento de la producción minera impulsaría un incremento de
infraestructura para evitar cuellos de botella, generándose un círculo virtuoso que aceleraría el
desarrollo del país.
Siguiendo la lógica anterior, se esperaría que la infraestructura proyectada en el Plan
Nacional tenga algún correlato con el incremento de la producción de cobre que es tan
importante para el Perú; mientras se desarrolla otros sectores económicos que contribuyan a
diversificar la economía (turismo, agroindustria, etc.).No obstante, al realizar este estudio se
encontró que los portafolios previamente mencionados no cuentan con una sinergia
significativa, pues la infraestructura de transporte propuesta considera solo una sinergia del 17%
del total de inversión de la Cartera de Proyectos de Infraestructura. Además, esta sinergia no es
suficiente para incentivar el crecimiento estimado de producción minera. En consecuencia, se
demuestra que no existe una planificación en conjunto entre los dos portafolios de proyectos
más importantes del Perú.