El estándar de consumidor razonable aplicado en los consumos fraudulentos generados por clonación
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Abstract
La mayoría de personas, hoy en día, posee una tarjeta de crédito,
normalmente para la compra de bienes y/o contratar servicios. Apuesto que la
mayoría de nosotros al haber firmado el contrato de tarjeta de crédito no lo ha
leído y es más, no sabe que tiene un deber de custodia de la misma; es decir,
no sabe que al momento de hacer uso de la misma, tiene la obligación de
vigilarla de manera que no vaya ser víctima de una clonación. Sin embargo,
muchos factores, entre ellos la confianza que se tiene al comprar en un
establecimiento, hace que nos descuidemos y que días después (cuando nos
llega el estado de cuenta de la tarjeta) nos percatemos que existen consumos
que no reconocemos.
En la actualidad, las tarjetas de crédito han servido como un medio eficiente
para agilizar las transacciones comerciales; sin embargo, el mismo avance
tecnológico que nos trajo ventajas ha traído una serie de riesgos.