Abstract
El texto, efectivamente, tiene la virtud de presentarnos las lecciones que contiene de manera ordenada, sencilla y didáctica, de modo tal que, siguiendo las instrucciones y recomendaciones señaladas, puede aprenderse la lengua “como jugando”. Más aún cuando el manual está diseñado para ser empleado en el aula por el profesor y los alumnos, con la ayuda de materiales audiovisuales, que hacen de la enseñanza-aprendizaje una tarea ágil, dinámica e interactiva, y no simplemente mecánica y repetitiva.