(Pontificia Universidad Católica del Perú. Fondo Editorial, 2017) Murphy, David S.
El Estándar Internacional de Auditoría 240 reconoce que la responsabilidad principal para la prevención y detección del fraude es de la organización, con los encargados del gobierno y de gestión (IAASB, 2009, p.4). Sin embargo, la norma también asigna al auditor externo la responsabilidad de «obtener una seguridad razonable de que los estados financieros tomados como un todo están libres de errores materiales, ya sean causados por fraude o error».