Fabiano, Emanuele2023-03-132023-03-132022https://repositorio.pucp.edu.pe/index/handle/123456789/190494Páginas 195-205Cuentan los urarina que las enfermedades, las más agresivas y virulentas, llamadas kunai mijiaainei, salpicaron de la cabeza quemada de un antiguo ayahuasquero para ejecutar su venganza en contra de guerreros rivales responsables de su muerte. Después de aniquilar al grupo de hombres, y así cumplir con el propósito por el cual fueron creadas, las enfermedades se dispersaron en los lugares más remotos del bosque o en las cabeceras de los ríos, para luego aparecer de vez en cuando, acechando a los humanos y sus aldeas (Fabiano & Nuribe, 2021). Desde entonces, las enfermedades aumentaron, cambiaron, y mientras algunas se quedaron a vivir en el territorio urarina, otras decidieron desplazarse hacia las ciudades y el mundo de los blancos. Aunque en el mito no se cuentan los estragos provocados por las epidemias de sarampión que desde este día en adelante han afectado cíclicamente la cuenca del Chambira, ni el dramático impacto que tuvieron al diezmar los habitantes de numerosas comunidades, nos dice mucho sobre el origen de las enfermedades que comúnmente se definen como «contagiosas».spainfo:eu-repo/semantics/embargoedAccesshttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/pe/Epidemias--Perú--Amazonía, Región--HistoriaEnfermedades--Perú--Amazonía, Región--HistoriaCOVID-19 (Enfermedad)--Perú--Amazonía, Región«Las enfermedades son espíritus modernos que aprenden en la ciudad» : representación urarina de la enfermedad infecciosa del sarampióninfo:eu-repo/semantics/bookParthttps://purl.org/pe-repo/ocde/ford#5.04.03