Guerra Martinière, Margarita2023-04-212023-04-212002https://repositorio.pucp.edu.pe/index/handle/123456789/192331Tomo 2. Páginas 1075-1089La salida de Bolívar del Perú, en septiembre de 1826, no produjo efectos inmediatos. Sin embargo, al pasar los meses y llegar noticias de la Gran Colombia acerca del conflicto existente entre los partidarios del Libertador y los otros caudillos, los políticos peruanos tomaron conciencia de que eso significaba el decrecimiento de la influencia bolivariana a nivel internacional y consideraron que era llegado el momento de organizar un gobierno netamente nacional, de acuerdo a nuestras propias aspiraciones y, naturalmente, las de los caudillos. Entre septiembre de 1826 y enero de 1827, el gobierno estuvo a cargo del presidente del Consejo de Gobierno, el general Andrés Santa Cruz, pero al generarse un movimiento contrario a Bolívar y en favor de nuestra total autonomía, se participó a dicha autoridad el deseo popular de convocar a un nuevo Congreso con el cual se diese inicio a nuestra vida independiente. Aquel estuvo de acuerdo y creyó que había llegado su turno. Así, el 26 de enero de 1827 se procedió a la convocatoria pedida. La nueva asamblea tuvo un doble objeto: elegir Presidente de la República y elaborar la nueva carta. En el ínterin Santa Cruz derogaba la Constitución Vitalicia (27 de enero de 1827) y declaraba la vigencia de la aprobada en 1823, mientras se elaboraba la siguiente.spainfo:eu-repo/semantics/openAccesshttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/2.5/pe/Perú--Historia--República--Aspectos políticosPerú--Historia--República--Aspectos socialesCaudillismo y poderinfo:eu-repo/semantics/bookParthttps://purl.org/pe-repo/ocde/ford#6.01.01https://doi.org/10.18800/9789972425127.066